Vivir sin identidad: China


Justo en el centro del pequeño pueblo agrícola de Beigaoli, en la provincia oriental china de Shandong, se encuentra un jardín de infantes. La mayoría de los niños del pueblo acuden todos los días a clases, cantan y se columpian al aire libre. Todo esto es gratuito.
Pero los padres de uno de los niños, de tres años de edad, tuvieron que sobornar a los maestros del kindergarten para que le permitieran asistir a clases.
Zhang Rundong es un niño pequeño con grandes ojos y una expresión seria. Es también ilegal, por ser el segundo hijo de la familia Zhang, nacido en violación de la política del hijo único en el país.
En represalia, los funcionarios locales han retenido sus documentos de identidad. Sin ellos, Rundong no tiene acceso al sistema de salud o a la educación gratuita, no puede viajar dentro de su país... ni siquiera puede usar una biblioteca pública.
A principios de este año, la política del hijo único de China fue flexibilizada, para permitir que algunas parejas tengan dos hijos. Pero nada ha cambiado para un estimado de entre 10 y 20 millones los niños ya nacidos en violación de la política original.
En su humilde hogar, los Zhang detallan su larga batalla con las autoridades, empezando por el fracaso en el control de natalidad de la señora Zhang, un mandato del gobierno.
"Me aterré cuando supe que estaba embarazada de nuevo", le dice Zhang Ailing a la BBC. "Por supuesto, también me sentí un poco feliz. Yo no quería que los otros aldeanos lo supieran y me obligaran a abortar el bebé".

Más que una multa
La experiencia de Li Xue

¿Cómo es crecer sin documentos de identidad en China?
Li Xue, de 20 años, es el ejemplo perfecto. Nacida en Pekín, es la segunda hija de su familia, nacida fuera de la política del hijo único. Ha vivido toda su vida sin la identificación que le permitiría acceder a los servicios del gobierno.
"No pude tener chequeos regulares de salud cuando era bebé ni pude recibir ningún tipo de vacuna básica", dice Li. "No pude ir la escuela para cursar los nueve años de educación obligatoria. Ahora, ni siquiera tengo un documento de identidad. No he recibido ningún tipo de educación y ningún lugar de trabajo me aceptaría".
La familia de Li ha estado inmersa en una larga batalla por obtener su identificación.
"Poco después de que naciera, mi padre fue a la estación de policía local para sacar mi registro", dice Li. "Mi padre visitó varios departamentos gubernamentales conmigo en sus brazos y trató de llevar el caso a los tribunales. Poco a poco fui creciendo durante este proceso, hasta que llegué a la edad escolar".
Ahora ella está tratando de demandar a la estación de policía por negligencia en el cumplimiento del deber. Dice que no existe ley que le prohíba recibir un documento de identidad.
"Durante todos estos años, porque no pude ir a la escuela, acompañé a mis padres en sus diligencias para tratar de resolver mi problema de identificación".
"La estación de policía no nos daba una y nos empezaron a vigilar. Hemos sido golpeados anteriormente. Fue terrible. No aceptaría los documentos de identidad si ellos me los dieran en este momento. Ellos violaron la ley y deben asumir su responsabilidad. No me gustaría que esto terminara de forma tan ligera".
Tras el nacimiento secreto de su hijo, la pareja pidió dinero prestado a amigos y familiares para pagar una multa de casi US$10.000.
En toda China, sólo en 2012, familias pagaron más de US$3.300 millones en multas similares, aunque no está claro a dónde va ese dinero. Los críticos creen que las multas se utilizan como un ingreso adicional para los gobiernos locales.
Los Zhang le mostraron a la BBC los recibos de pago de las multas entregados por los funcionarios comunistas locales. Estos papeles, sin embargo, no parecen ser documentos oficiales del gobierno: están escritos a mano en pequeños trozos de papel, lo que ilustra el carácter arbitrario del sistema de castigo del Partido.
En algunas partes de China, quienes violan la política del hijo único pagan multas cuyos montos pueden disminuir si se negocia con las autoridades locales antes de obtener los documentos de identidad de sus hijos. Otros, como los Zhang, no han tenido tanta suerte.
La multa que le impusieron a la familia ya fue pagada, pero aún no es suficiente para los funcionarios locales.
Grabaciones de audio secretas, presuntamente revelan una exigencia adicional del jefe del partido en el pueblo de Beigaoli: Zhang Ailing tiene que ser esterilizada.
La pareja no quiere tener más hijos, pero se niegan al procedimiento, argumentando que viola sus derechos fundamentales.
"Muchas mujeres han sido esterilizadas a la fuerza", explica la señora Zhang. "Tenemos miedo de que funcionarios me detengan y me hagan la operación si mi marido sale de la casa".
El equipo de la BBC visitó la oficina de planificación familiar del pueblo, pero nunca hubo nadie disponible para hablar con nosotros. Las repetidas solicitudes de entrevistas fueron ignoradas.

"No voy a poder pagar en esta vida"

Por haber violado la política del hijo único, Liu Fei encara una multa equivalente a 14 veces su salario anual.

A casi 500 kilómetros al norte de Beigaoli, otra madre también está exigiendo respuestas.
En la periferia al norte de Pekín, Liu Fei también está luchando con funcionarios locales de su área para sacar los documentos de identidad de su hijo.
Su hijo de ocho años de edad ni siquiera tiene una partida de nacimiento, aunque, por el momento, Liu encontró una escuela que le permitirá asistir a clases.
Liu Fei fue objeto de un castigo inusualmente duro luego de tener su segundo hijo en su segundo matrimonio. Debido a que su segundo marido también tenía un hijo, el gobierno está tratándola como si ella tuviera tres hijos propios. Ahora se enfrenta a una multa de US$54.000, que es 14 veces su salario anual como empleada de un almacén.
"No voy a poder pagar en esta vida", le dice Liu Fei a la BBC, antes de estallar en lágrimas.
Por ello esta viuda está demandando a las autoridades locales, algo casi inaudito en China.
"Si ninguna ley específica del gobierno le niega mi hijo una identidad antes de pagar la multa, entonces él debe recibir una", explica. "Si ellos no se la dan eso, yo voy a apelar".
Liu y su abogado creen que es ilegal que el gobierno de Pekín le niegue los documentos de identidad a un niño hasta que la multa de la política del hijo único haya sido cancelada.

Su caso que podría sentar un precedente para millones de personas en la misma situación, aunque la mayoría coincide en que la familia Liu tiene pocas esperanzas de ganar. El derecho legal de este niño de existir probablemente seguirá ligado a las batallas de su madre con el gobierno. Fuente: BBC

Tráfico de vida silvestre: ¿legalizarla?


El tráfico ilegal de animales es un negocio que mueve anualmente una cantidad descomunal de dinero: US$19.000 millones.
Y todos esos billetes son a costa de los colmillos de los elefantes, los cuernos de los rinocerontes, las pieles de los grandes felinos, los cuales son cazados de forma ilegal para suplir una demanda que algunos comparan con el negocio de las drogas.
"El marfil y el cuerno de rinoceronte son la cocaína el sudeste asiático", tituló al respecto Simon Jenkins, columnista de diario británico The Guardian.
Al año son cazados de manera ilegal unos 20.000 elefantes y 1.000 rinocerontes, entre otras especies.
Por esa razón esta semana se reunieron en Londres representantes de 40 países y 11 organizaciones para tratar el tema.
Y a pesar de la contundencia de las cifras, durante la reunión se planteó una propuesta polémica: la legalización del comercio de estos animales para suplir la demanda.

La propuesta

Aunque hace más de 30 años que se viene tocando el tema, en junio de 2013 el gobierno de Sudáfrica propuso la legalización del comercio de cuernos de rinoceronte, con el objetivo de reducir la caza furtiva de estos animales en su territorio.

Al año mueren unos 1.000 rinocerontes en África para quitarles sus cuernos.
Para el economista Michael 'It Rolfes, la idea es buscar alternativas para evitar el sacrificio indiscriminado de los animales mediante un comercio controlado.
"No se ve una reducción de la demanda en el corto plazo. Las personas en el lejano oriente creen firmemente en que el cuerno de rinoceronte puede curar el cáncer u otras enfermedades y el mercado negro lo único que hace es lucrar con esa creencia", explicó Rolfes a los medios durante la conferencia.
Una de las alternativas que proponen no solo Rolfes sino distintas organizaciones alrededor del mundo es la de la "ganadería" de rinocerontes, que permita criar una cierta cantidad de ejemplares para suplir el mercado global.
"También debemos buscar la manera de reunir los cuernos que obtenemos de los animales que han muerto de forma más efectiva. La idea es evitar que mueran más animales de forma ilegal y sin control", señaló Rolfes.

No hay datos ciertos

Sin embargo, muchos especialistas y organismos son escépticos ante la posibilidad de la idea de la legalización.
Ante la propuesta de la "ganadería" no solo hecha por Rolfes sino también por conservacionistas como Brendan Moyle, surgen varios interrogantes.

Algunos de los puntos acordados por los representantes de 40 países en la reunión de Londres sobre protección de la vida salvaje, contra el tráfico ilegal y la caza furtiva son:
Tratar el tráfico de animales como un crimen serio, de acuerdo a la convención de Naciones Unidas contra el crimen organizado internacional.
Manejar el problema de corrupción y lavado de dinero relacionado con el tráfico de animales con leyes de cero tolerancia.
Fortalecer el marco legal contra el crimen y ayudar a la fuerza pública que se enfrenta contra este tipo de crímenes.
Buscar apoyo interinstitucional para robustecer la eficacia de las entidades dedicadas a cuidar la vida silvestre.
Denunciar a los gobiernos que estén facilitando el tráfico ilegal.
Denunciar a los gobiernos que utilizan los productos prohibidos o ilegales de especies en peligro de extinción.
"Una de las principales dificultades que tiene una propuesta de esa naturaleza es que carece de fundamentos reales, está basada en una economía de servilleta, muy básica", le dijo a BBC Mundo el profesor del Centro de Estudios Económicos del Colegio de México, Alejandro Nadal.
Nadal, quien estuvo en las conversaciones de Londres, señaló que las organizaciones detrás del comercio ilegal tienen muchas formas de hacer una "guerra de precios" que, si no se enfrenta de manera adecuada, podría ser fatal para la protección de las especies.
"Los traficantes no están solo detrás de los cuernos de rinoceronte, también están en el negocio de las pieles, del marfil, de los animales exóticos. Y pueden manejar los precios de cualquier producto sin poner en peligro su rentabilidad", explicó Nadal.
Para él la lucha debe encaminarse a reducir la demanda a través del mercadeo.
"Japón y Europa eran grandes compradores de marfil hace cien años y de alguna manera eso se logró cambiar. Es falso decir que la demanda no se puede reducir", dijo el académico.

Crimen organizado

Otro factor que los analistas observaron fue el preocupante aumento de la participación de organizaciones criminales dedicadas al comercio del tráfico animal.
"Grupos que habitualmente estaban dedicados al tráfico de drogas o la venta de armas, se están moviendo hacia el comercio de animales", le dijo a la BBC Davyth Stewart, miembro de inteligencia de la Interpol.
Evidentemente no es una pelea justa: conservacionistas contra bandas criminales.
Sin embargo, los expertos en vida salvaje afirman que es una pelea que deben tomar.
El problema en esta lucha es que, según el mismo Stewart, los criminales lucran con mucho dinero con un riesgo muy bajo.
"No hay recursos en las fuerzas policiales para combatir como se debe este delito. Y por supuesto, en la policía existen otras prioridades", dijo Stewart.
Y añadió que "además es un asunto que también pasa por la legislación. Por ejemplo, el año pasado en Irlanda arrestaron a dos hombres por una carga de cuernos de rinocerontes que valía casi US$ 1,5 millones y solo recibieron una multa por 500 euros".

Otro de los "rubros" del comercio ilegal de vida silvestre son las pieles. Tigres, leopardos y osos son los más apreciados en el lejano oriente.

Demanda y oferta

La mayoría de los activistas presentes en la reunión están de acuerdo con Nadal: uno de los problemas que debe combatirse es el de la alta demanda de marfil y cuernos de rinocerontes.
Es sencillo: si la gente no quiere más productos animales, el mercado no existe, se acaba el negocio, los criminales pierden interés, los intermediarios se desvanecen y los cazadores furtivos paran de cazar.
"Creo que el gran desafío ahora es que la demanda por productos de animales salvajes está por las nubes, disparada", le dijo a la BBC John Robinson, director de la Sociedad de Conservación de la Vida Salvaje.
"Lo que estamos viendo es una fuerte demanda de los países del lejano oriente, especialmente China", explicó Robinson.

"Hay dos pasos para resolver la demanda: que la gente comprenda que esos objetos vienen de animales vivos. Y que para obtener ese material, hay que matar al animal. Eso no lo entiende mucha gente en el mundo", concluyó Robinson. Fuente: BBC

Piratería somalí


Hace tiempo que los ataques piratas a barcos en aguas del océano Índico o del mar Rojo no aparecen en los medios de comunicación. Lejos quedan los días en que este tipo de noticias abrían los telediarios o eran portadas de diarios.
Este hecho puede ser indicativo de que el número de ataques piratas en África ha decaído considerablemente. Así se desprende del informe anual del International Maritime Bureau (IMB) sobre piratería y atracos armados contra barcos.
Las cifras que muestra el documento hablan de que de los 79 ataques piratas que ocurrieron cerca de África en 213, solo 15 fueron atribuidos a somalíes. Esto supone un gran descenso ya que en 2012 fueron 75 y en 2011 hubo 237.
Estos números hacen concebir esperanzas respecto a que los ataques de piratas somalíes ya no supongan el peligro del pasado y a que pudieran estar en vías de desaparecer.
Según el IMB, la seguridad privada que acompaña a los baros, las operaciones internacionales de patrullaje y la cada vez mayor influencia y colaboración del gobierno somalí han sido cruciales en este cambio de tendencia.
Sin embargo, Timothy Walker,invertigador del Instituto para Estudios de Seguridad en África (ISS), diverge de esta impresión general. La clave, para él, está en que las estadísticas no reflejan la realidad de lo que está pasando, recogiendo muchos menos incidentes de los que ocurren.
El mismo IMB reconoce que el verdadero número de ataques piratas puede ser mayor. La principal razón aportada es que no se registran todos los casos ya que muchos de los dueños de las compañías a las que  pertenecen los barcos se niegan a informar de los ataques o intentos que sus naves puedan sufrir ya que  esto acarrea costes adicionales y retrasos mientras se investiga el incidente. Es por ello que el IMB avisa de que el informe final no demuestra, fehacientemente, que el problema de la piratería en África esté disminuyendo.
El mismo informe anterior indica que la piratería en África occidental, especialmente en las aguas ricas en yacimientos de petróleo de Nigeria, Gabón, Costa de Marfil y Togo, significó el 19 % de todos los ataques ocurridos en el mundo. IMB señala a los piratas nigerianos, responsables de 31 de los 51 ataques ocurridos en la región, como especialmente violentos.
Hay que tener en cuenta que a pesar de que los ataques piratas cerca de las costas somalíes hayan descendido, las causas que están detrás de la pirateríano. El escaso control del Estado, la falta de oportunidades económicas legales y la ausencia del Estado de Derecho son elementos que todavía no han sido resueltos y por eso la piratería en la zona podría volver a escalar si las patrullas navales se redujeran.
En el caso del Golfo de Guinea, las razones existentes para el surgimiento de la piratería no son muy distintas a las de Somalia, aunque en estos países la presencia del estado sea mayor. Sin embargo, la marginalización de grandes segmentos de la población, la pobreza y el desempleo, la falta de oportunidades para ascender en la escala social, el surgimiento de grupos criminales, un estado percibido como represor, entre otros muchos elementos, han dado lugar a que la violencia, el crimen y la economía ilegal adquieran una gran aceptación social en muchas zonas costeras de Nigeria, principalmente. En esta nueva forma de supervivencia participan tanto las elites locales como la población más marginada.
Por el Golfo de Guinea circula gran cantidad de petróleo, minerales, madera o productos agrícolas. Por eso, el incremento de la piratería en esta zona puede tener un impacto directo sobre la economía de la región y facilitar grandes beneficios a los grupos que están detrás de ella.
La fuerte y decidida intervención internacional contra la piratería somalí que tantos frutos ha dado es difícil que se pueda reproducir en el Golfo de Guinea, entre otras razones porque los recursos de los países son limitados y esta operación significaría transferir activos de una zona a la otra. Aunque los grandes intereses económicos de Estados Unidos y la Unión Europea en la región pudieran justificar la intervención, quizás esta se centre más en trabajar conjuntamente con los gobiernos de la zona y fomentar la formación de personal local que se encargue de las patrullas y la persecución de este delito.
Algunos especialistas no están de acuerdo en calificar los incidentes ocurridos en la costa occidental de África como actos de piratería ya que al no producirse en alta mar, sino en las aguas territoriales de Nigeria o de los estados vecinos, bajo el Derecho Internacional, serían atracos a mano armada. Esta es la opinión de Mark Munson, oficial de inteligencia estadounidense, por ejemplo.
Que estos ataques ocurran en aguas territoriales, a diferencia de los de los piratas somalíes, tiene muy distintas consecuencias. Una de ellas es que la seguridad de estas aguas es responsabilidad del estado.Por eso, no se podría producir una respuesta internacional similar a la organizada en Somalia sin contar con el consentimiento de los gobiernos de la zona.
Además, el Golfo de Guinea es la región por las que se mueve más tráfico de drogas, seres humanos o armas del mundo, lo que muchas veces conlleva la implicación de los agentes del orden, de los políticos y de lo gobiernos locales y nacionales. Esta participación de agentes locales en las acciones criminales hace, según Vanda Felbab-Brown, investigadora del Centrer for 21st Century and Intelligence, que esta sea otra razón por la que resultaría mucho más difícil la intervención internacional, ya que tocaría intereses económicos de muchas personas.
A finales de enero concluyó la 22 sesión ordinaria de la Unión Africana (UA) en la que se adoptó el Plan Marítimo Integrado Para África (AIM). Se trata de un plan de acción que estará en vigor hasta el año 2050. La primera fase (2015-2025) está dedicada a los mares y océanos del continente y la UA ha invitado a todas las organizaciones económicas regionales a adoptar planes contra la piratería, el robo armado y otras actividades ilegales que se comenten en el mar.
Este plan es el primer intento netamente africano por ocuparse de la seguridad marina del continente sin depender de la intervención extranjera.
El AIM promueve, entre otras medidas, la mejora del nivel de vida de todos los grupos sociales, especialmente de las poblaciones costeras, poniendo así de relieve que la regulación y gestión de los asuntos y recursos marinos no puede estar controlado por unos pocos sectores o industrias selectas.

Este último punto es muy importante porque todos sabemos que si realmente se quiere terminar con el problema de la piratería, tanto en Somalia como en el Golfo de Guinea, no bastará con la intervención internacional o el empoderamiento de las fuerzas del orden y militares de los países de la zona. Como en tantas otras situaciones hay que atacar las verdaderas raíces del problema: la pobreza, la marginación y la corrupción. Todo las demás medidas no dejarán de ser parches que nunca conseguirán acabar con la piratería. Fuente: El País

Exportaciones, paraísos fiscales y conflictos por las desiguladades en China


El mes pasado se anunció que Chi­na se había convertido en 2013 en la primera potencia comercial del mundo, algo que ha vuelto a extender las especulaciones sobre cuándo se convertirá en la primera economía mundial. Por otro lado, hace apenas dos semanas varios periódicos internacionales revelaban una intensa actividad de parientes de dirigentes del Partido Comunista Chino (PCCh) en paraísos fiscales. No obstante, aunque relevantes, estas noticias no son sino el aspecto más mediático de las contradicciones del proceso chino de transformación.
China ha construido su éxito económico sobre la expansión de las desigualdades. La limitación del incremento de los precios agrícolas ha provocado uncontinuo proceso de migración campo-ciudad. Esta migración ha nutrido de fuerza de trabajo a las fábricas de la industria exportadora. Sin embargo, al no poder acceder a un permiso de residencia urbano, los migrantes rurales se han encontrado sin derechos dentro de su propio país. La presión que esto ha generado sobre los salarios ha permitido inundar el mercado mundial de productos made in China. 

A pesar del discurso de conflicto con Estados Unidos, este modelo de crecimiento se ha estructurado en simbiosis con la economía norteamericana: mientras ésta se convertía en el principal mercado de las exportaciones chinas (sólo superado por la UE, tomada en su conjunto), el Ban­co Central de China ha ayudado a financiar los “déficit gemelos” (fiscal y externo) de EE UU mediante continuas compras de bonos del Tesoro. 

Aunque esto ha permitido a la economía china crecer como lo ha hecho, también ha generado un profundo incremento de las desigualdades sociales. El 10% de las familias urbanas más ricas ha pasado a acaparar más de un cuarto de la renta disponible generada. La corrupción es un fenómeno generalizado. No obstante, un enriquecimiento como ése no puede explicarse sólo por ella. Por el contrario, la fuente principal de la que ha bebido es la extracción de beneficios por parte de las empresas chinas.  La élite política que pone la riqueza familiar a salvo en paraísos fiscales es únicamente la cara visible de una burguesía de la que ha pasado a formar parte, pero de la que en absoluto es su miembro principal. No en vano, es probable que la publicación de los denominados “China­leaks” vaya a tener más impacto externo que interno. No sólo debido a la censura informativa que reina en China, sino también a que la corrupción que percibe la población es la más cercana; entre otra, la de los dirigentes locales que expropian, en beneficio de alguna compañía local, tierras públicas explotadas en usufructo por familias campesinas. 

Protestas populares

Frente a estas prácticas se han producido importantes protestas populares, como las que se desarrollaron en Wukan, en la provincia de Guang­dong, a finales de 2011. No obstante, la gestión de las protestas llevada a cabo por el PCCh, basada en el consentimiento de las que surgen espontáneamente, la represión de cualquier atisbo de organización política que pretenda ir más allá de ellas y la destitución de algunos de esos dirigentes corruptos, se ha demostrado hasta ahora capaz de evitar un cuestionamiento generalizado de la legitimidad del poder del Partido.
Los cambios en su cúpula que se han producido en los dos últimos años parecen señalar hacia una continuidad con esas políticas. Xi Jin­ping impulsó nada más acceder al cargo de secretario general una campaña de lucha contra la corrupción dentro del PCCh. Al mismo tiempo, el Comité Central del Par­tido autorizó en su III Sesión Ple­naria la creación de un Comité de Seguridad Estatal a través del cual se quieren coordinar las medidas de represión y control social. En esa misma sesión, también se aprobó conferir un rol “decisivo” al mercado dentro de la economía china, que aún se encuentra parcialmente controlada por el Es­tado. Esta medida, cuyo principal objetivo va a ser la puesta en marcha de una liberalización financiera, amenaza con volver a incrementar la desigualdad interna. Abrir nuevos ámbitos de negocio para el capital parece la única vía que tiene China para sortear la crisis. No obstante, si quiere evitar un incremento de la inestabilidad social, el Gobierno del PCCh deberá retomar las medidas redistributivas que durante los últimos meses parece haber dejado de lado.

En ese caso, la única manera de que esas medidas no cuestionen los intereses de la burguesía china será tratar de “externalizar” el conflicto distributivo interno tratando de acaparar los mercados de materias primas, deslocalizar fábricas y empezar a competir en sectores de alta tecnología. Si esto acaba siendo así, la batalla contable sobre cuál es la primera economía del mundo podría llegar a convertirse en un conflicto real entre China y EE UU. Por el momento, la relación entre ellos sigue estable a pesar de las filtraciones de los medios internacionales.

Represión del Gobierno chino contra los uigures

La mano dura de Pekín contra los separatistas uigures cobra fuerza. El 14 de enero fue detenido en su domicilio el intelectual Ilham Tohti. En noviembre, el intelectual denunció un ataque en Pekín de un grupo de policías en represalia por sus declaraciones a medios de comunicación internacionales sobre el atentado ocurrido en octubre en Tiananmen, en el que murieron cinco personas. Según líderes de la comunidad uigur en el exilio, en una de las protestas de jóvenes de la etnia musulmana uigur en 2009, más de 10.000 uigures desaparecieron, aunque el Gobierno sólo reconoce 200 desaparecidos. Fuente: Diagonal

NATURALEZA

La fuerza de la Naturaleza siempre sorprende. Se nos olvida que, aún, hay muchas cosas que ni sabemos ni podemos dominar.....