Digamos que en el curso A de matemáticas, de 100 alumnos inscriptos no ha aprobado ninguno; y que en el curso B, de 10 alumnos inscriptos, tampoco ha aprobado ninguno. El primer curso es "peor" que el segundo; o al menos el profesor o profesora de seguramente A se siente mucho peor que el profesor o profesora de B. Sin embargo, en ambos casos el porcentaje de aprobados ha sido el mismo, 0%; por lo que la sensación del profesor de A es totalmente ficticia.
Visto de otro modo, 0/100 es menos que 0/10, al menos desde un punto de vista psicológico.