¿Qué es?
Una cesárea es una intervención quirúrgica en la que se lleva a cabo la extracción del bebé y de la placenta del útero materno. Esto se realiza cuando hay alguna complicación inesperada durante el parto o cuando el parto vaginal no es posible. Los problemas que se dan con mayor frecuencia y por los cuales hay que realizar esta operación son:
- Problemas en la salud de la madre.
- Por la posición del bebé dentro del útero.
- Por falta de espacio para que el bebé salga por el canal vaginal.
- Porque se detectan signos de sufrimiento en el bebé.
La mayoría de los partos son vaginales. Solo uno de cada cuatro son por medio de esta operación y se llevan a cabo normalmente en mujeres con embarazo múltiple.
Procedimiento
Esta operación consiste en practicar una incisión en el abdomen y en útero de la madre. Para ello primero se administra la anestesia a la paciente. Se suele emplear anestesia epidural que sólo duerme de cintura para abajo y que evita sentir dolor, aunque sí que puede que se sientan algunas molestias. Antes de la anestesia hay que tener colocado siempre un catéter endovenoso para inyectar cualquier medicación que deba usarse durante la cesárea y para mantener la hidratación de la madre. Después se aplicará una disolución antiséptica en el abdomen y se rasurará el vello púbico de la paciente. Seguidamente se practicará la incisión por encima del hueso púbico y de forma horizontal. Luego se hará la incisión en el útero y para finalizar se llevará a cabo la extracción del bebé así como de la placenta y se cerrarán las incisiones.
En el quirófano encontraremos dos ginecólogos, un anestesista, una enfermera instrumentista y otra circulante.
Riesgos
A pesar de ser una cirugía mayor, no existen relativamente riesgos ni para la madre ni para el bebé pero esto no quiere decir que no nos los podamos encontrar. Por ejemplo, tras la cesárea, un área de la pared uterina puede quedar más debilitada y esto podría suponer problemas para llevar a cabo futuros partos vaginales. Sin embargo, más de la mitad de las mujeres a las que se le realizó esta operación pudieron conseguirlo.
Recuperación
Tras esta intervención la paciente precisa de un mayor período de tiempo para su recuperación que si fuera parto vaginal. Debe pasa entre 2 y 4 días en el centro hospitalario. Se recomienda a la paciente que camine para que se reponga más rápido de la operación y si hubiese dolor se le administrarían analgésicos.