¿Qué es la hernia epigástrica?
Hernia epigástrica entre zona superior del ombligo y terminación del esófago |
La hernia epigástrica se origina entre la zona superior del ombligo y la terminación del esófago. Como el resto de las hernias, lo que ocurre es que en una zona debilitada del abdomen se produce la salida de estructuras que pertenecen al interior del abdomen.
Los factores que favorecen a la salida de esta hernia son los esfuerzos muy grandes, obesidad, tos crónica, estreñimiento y dificultad para orinar o defecar.
La hernia epigástrica es más frecuente que aparezca en hombres que en mujeres y su incidencia es mucho mayor en la juventud.
¿Qué tratamiento se aplica ante una hernia epigástrica?
La operación que se llevaría a cabo recibe el nombre de "herniografía epigástrica", es decir, la reparación quirúrgica de la zona de la pared abdominal afectada. Con la cirugía, además de conseguir una mejora de la salud a largo plazo, también evitará muchas complicaciones que podría surgir a causa de tener una hernia.
Esta técnica quirúrgica se puede realizar con anestesia general (método que hace que esté dormido durante toda la operación) o con anestesia local o regional (es aquella que se le aplica exclusivamente a la zona en la que se va a hacer la cirugía, el resto el cuerpo y usted, estará consciente).
El cirujano realizará un corte entre la zona superior del ombligo y la terminación del esófago (área del cuerpo mostrada en la primera imagen). Una vez realizada la incisión, localizará el saco herniano, que es la hernia, y introducirá todo su contenido en el interior de su abdomen hasta que se encuentre en la posición correcta. Cuando el contenido está colocado proceden a cerrar la herida quirúrgica dejando reforzada la zona con tejido de su propio cuerpo que suelen sacar de la zona glútea o a través de mallas artificiales que dan fantásticos resultados. Esto es necesario para que en esa zona debilitada no vuelva a aparecer la hernia aunque en ocasiones puede resurgir. El corte realizado se lo cerrarán a través de una sutura utilizando un hilo no reabsorbible porque tiene una alta resistencia a la tracción y provocan una baja reacción de los tejidos.
La duración de la operación es entre 20 o 45 minutos si no existen complicaciones, lo cual es poco común ya que es un procedimiento muy seguro. Además, la recuperación tras la cirugía será muy rápida y podrá volver a su vida normal muy pronto.
Como en el resto de las hernias, esta operación también puede realizarse a través de una laparoscopia.
¿Qué riesgos existen?
- Sangrado
- Infección
- Daño de un órgano en caso de que sea una hernia encarcerada.
- Muerte de un órgano en caso de que sea una hernia estrangulada, pues no le llegará sangre al órgano porque está atrapado.
El los dos últimos riesgos la actuación debe de ser rápida.
Para ver las entradas anteriores sobre las hernias, pueden entrar en los siguientes enlaces: