Existen 3 variantes de trasplante de hígado:
- Trasplante de hígado completo procedente de un donante fallecido.
- Trasplante auxiliar, en el cual el hígado del donante se implanta sin extirpar el enfermo.
- Trasplante parcial, en el que se implanta solo una parte del hígado. Para este tipo de trasplante el donante puede ser un familiar vivo.
Indicaciones
El trasplante de hígado está indicado, principalmente, para aquellas personas con cirrosis, que puede desencadenar en insuficiencia hepática, hepatitis fulminante, tumores hepáticos, etc...
En niños está indicado para tratar la atresia biliar.
Otras enfermedades tratables mediante un trasplante son:
- Hepatitis autoinmune
- Trombosis de la vena hepática
- Daño hepático por intoxicación o medicamentos
- Cirrosis biliar primaria
- Colangitis esclerosante primaria
- Enfermedad de Wilson
- Hemocromatosis
- Tuberculosis
- Osteomielitis
- Cardiopatía, neumopatía o hepatopatía
- Hepatitis activa
- Tabaquismo, alcoholismo o drogadicción
Procedimiento
El hígado sano se extirpará por medio de una incisión quirúrgica en el cuadrante derecho del abdomen.
Para su transporte, se introducirá en un solución salina refrigerada, donde puede permanecer hasta 8 horas sin deteriorarse. Mientras tanto, podrá confirmarse la compatibilidad entre donante y receptor, o identificar posibles anomalías en el hígado donante. Si el trasplante es programado, las pruebas de compatibilidad se deberán realizar previa programación de la intervención.
En el momento de la implantación, se le realizará una incisión, igual a la del donante, al receptor, y se unirá el hígado donante a los vasos sanguíneos hepáticos del receptor y a los conductos biliares.
Está operación, normalmente, requiere de una gran cantidad de sangre para trasfundir.
Preparación para la intervención
Antes de ponerlo en la lista de espera para un trasplante, le realizarán las siguientes pruebas:
- Histotipado
- Grupo sanguíneo
- Electrocardiograma y ecocardiograma
- Exámenes para examinar el estado del hígado, páncreas, vesícula biliar e intestino delgado.
- Colonoscopia
Pronóstico
Como en todos los trasplantes, existe la posibilidad de rechazo del órgano, es decir, que el sistema inmunitario del receptor no reconoce como propio el trasplante y lo rechaza.
Estas situaciones pueden evitarse administrandole al paciente inmunosupresores. El inconveniente de este tratamiento es que también aumenta el riesgo de infección durante la operación.
Si el trasplante ha sido un éxito deberá tener un seguimiento exhaustivo por parte de su médico y tomar fármacos durante el resto de su vida.
Para más información: visite la "Guía para el cuidado después del trasplante de hígado" disponible en el link del apartado de la derecha.