Lanzan primer vino blanco de reserva trivarietal de Bolivia
Luego de dos años y medio de preparación, la bodega tarijeña Campos de Solana pondrá desde el próximo mes al mercado boliviano el primer y "único” trivarietal blanco reserva.
De acuerdo con la descripción, la combinación del nuevo vino contiene tres cepas: viognier, riesling y sauvignon blanc; al ser ensambladas se obtiene un producto cuya cualidad se potencia en una bebida premium.
El director ejecutivo de la firma, Luis Pablo Granier, destacó que el nuevo producto es pionero en la mezcla de variedades.
"Es un trivarietal de los que no se había escuchado nunca en Bolivia. Se hizo una innovación al meter en barricas de roble francés, hay vinos blancos, pero este es un ensamblaje de variedades nuevos y que se adecúan al terreno alto, como es Tarija”, resaltó.
El empresario anticipó que el producto, que estará listo en los mercados del país a partir de junio, sólo tiene una edición limitada de 4.800 botellas.
Debido a la innovación, poco a poco entrará al mercado; dijo que toma cuatro años para que una viña dé frutos, además hay que sumarle el tiempo de espera en la barrica.
La preparación estuvo a cargo de un equipo de expertos de la marca, al cual acompañó un enólogo especializado en la producción vitivinícola.
El lanzamiento del trivarietal blanco complementa el portafolio de reservados de la bodega. En la versión en tintos de la categoría, el tri constituye el producto con más premios internacionales de la marca. "Conocemos al consumidor de vinos trivarietales, es exigente, pero al mismo tiempo está dispuesto a probar nuevos productos y cepas”, manifestó el gerente de Marketing de Campos de Solana, Demian Solares.
Los problemas del sector
Paralelamente, Granier manifestó que las recientes normas aprobadas por el Gobierno de alguna manera los ayuda, aunque el contrabando continúa afectando al sector.
"Creo que la intención del Gobierno no ha sido mala, pero hay que analizar el problema a profundidad, porque al subir los aranceles crece el contrabando. Entonces es un efecto bumerán, hoy en día perdemos competitividad ante productos de contrabando más baratos”, manifestó.
Sugirió organizar una coordinación entre las autoridades y representantes del sector, y así planificar una solución al problema.
A fines de enero pasado, el Gobierno, mediante el Decreto Supremo 2657, elevó hasta 40% los aranceles para la importación de bebidas alcohólicas, que además deberá contar con autorizaciones previas y certificación.
Las mercancías que están sujetas a un pago del gravamen arancelario del 40% ahora son la cerveza de malta, el vino de uvas frescas, el vino espumoso, el vermut y demás vinos de uvas frescas preparados con plantas de sustancias aromáticas.