El legado de Mandela, Mbuye Kabunda


[Mbuye Kabunda es profesor en la Universidad Autónoma de Madrid]
Mandela era un patriarca, un conciliador que, sin rencor después de más de 27 años en la cárcel, miraba más hacia el futuro que hacia el pasado. Era el sabio africano, el símbolo de la libertad, la paz y la reconciliación y el modelo del futuro jefe de Estado en África.
Era sin lugar a dudas el personaje político más venerado del mundo, dotado con un excepcional encanto personal y político, indiferente hacia los bienes materiales y el dinero, poniendo por encima de todo la sinceridad y la humildad.
Cuidadoso de las apariencias o del poder de la imagen, aparecía en público con las llamadas “camisas Mandela” multicolores -en sustitución de sus elegantes trajes cruzados de raya diplomática de los que era aficionado antes de ser encarcelado- para transmitir una nueva imagen de liderazgo diferente de la occidental, pero sí africana y autóctona, al tiempo diferente de los déspotas africanos, dando públicamente pasos de baile si fuera necesario, y atendiendo siempre a los medios de comunicación.
Era una simbiosis perfecta de la educación tradicional y la moderna, impregnado con la filosofía africana del Ubuntu (la hermandad). Un hombre siempre cercano al pueblo. Era pura bondad.
El personaje
Nelson Rolihlahla Mandela, Madiba, nació el 18 de julio de 1918, en Qunu, en el Transkei. Era un hombre de casi un metro noventa de altura, delgado y atlético con un hermoso color caramelo, un moreno suave, dorado o canela, y amante del jogging.
Cursó derecho en la Universidad de Fort Hare, la única institución de enseñanza superior, en su época, a la que podrían acceder los negros en el África Austral. Es allí donde empezó a desarrollar sus actividades políticas y se puso en contacto con los miembros del Congreso Nacional Africano (ANC). Por esta razón fue expulsado de esta universidad en 1940, y se afincó en Johannesburgo, donde finalizó sus estudios por correspondencia en la universidad de Witwartersrand, consiguiendo el título de abogado. Poco después creó un bufete de abogados negros con sus incondicionales compañeros, Oliver Thambo y Walter Sisulu, los futuros dirigentes de la lucha contra el apartheid en Sudáfrica.
Ante la intensificación de la represión, y sobre todo a raíz de las matanzas perpetradas por la policía racista en Shaperville, el 21 de marzo de 1961, el ANC optó por la lucha armada y creó la rama militar, el Umkhonto We Sizwe, de la que Mandela fue nombrado comandante. Lo que condujo a su detención, en 1964, junto a sus compañeros, acusados de “terrorismo” y condenados en el llamado “juicio de Rivonia” a cadena perpetua en la cárcel de la isla de Robben y distintas cárceles de la región de El Cabo.
El legado sudafricano de Mandela
El fin de la Guerra Fría convirtió en obsoleta la excusa de la lucha contra el comunismo en la región por el Gobierno racista, para conseguir el apoyo occidental y mantener el sistema del apartheid. A ello es preciso añadir la derrota militar de las tropas sudafricanas de ocupación en el sur del Angola (la batalla de Cuito Cuanavale), en 1988, junto a las sanciones internacionales que debilitaron completamente la economía del país. Todos estos factores crearon las condiciones para las negociaciones entre el ANC y el Gobierno, con la consiguiente independencia de Namibia y la liberación de Mandela.
Liberado el 11 de febrero de 1990, a los 71 años, Mandela lideró el ANC en las negociaciones con el National Party (NP), el partido de Gobierno encabezado por Frederik Willem de Klerk, para poner fin al sistema del apartheid y para la democracia.
Elegido en abril de 1994 como primer presidente negro de la Sudáfrica democrática, Mandela destacó una vez más por su autoridad moral, apostando por la reconciliación entre las razas y los grupos étnicos, cuando todo el mundo presagiaba la guerra civil o la yugoslavización del país, mediante la Comisión Verdad y Reconciliación (TRC), para aclarar los crímenes del apartheid e instaurar la cultura del perdón entre las víctimas y sus verdugos, de ambos bandos.
Llevó a cabo una política económica liberal, haciendo caso omiso de las presiones de sus aliados del Partido Comunista y del ala anti-liberal del ANC, cediendo sólo en las políticas de discriminación positiva y de empoderamiento de los empresarios negros (GEAR), siendo el objetivo reducir las desigualdades raciales y sociales heredadas del apartheid.
Se le recordará también por su firme compromiso en la lucha contra el VIH/sida, sobre todo después de las polémicas afirmaciones de su sucesor, Thabo Mbeki, -que consideraba los antirretrovirales igual peligrosos que el propio sida, en un país con 5 millones de seropositivos en 2005-, pidiendo la implicación del Estado en el apoyo a los enfermos de sida a los que se debería suministrar los fármacos antirretrovirales, y reconociendo públicamente la muerte de su hijo, Makgatho, en el mismo año, por esta enfermedad. De este modo, puso de manifiesto su apoyo a las personas más vulnerables y desfavorecidas, encabezando la lucha contra la pandemia.
La herencia de Mandela en la región
Cosa inédita en el continente, donde los gobiernos jacobinos defienden el carácter unitario y centralizado del Estado, Mandela aceptó la inclusión en la nueva Constitución sudafricana del derecho a la autodeterminación interna para los grupos que comparten cultura y lengua comunes, precisamente para no herir las susceptibilidades de los nacionalistas zulúes y afrikáners.
Demostró ser tolerante con las ideas y opiniones contrarias a las suyas y para respetar o representar los intereses de todos los grupos, mediante la incorporación de miembros de la oposición en su primer Gobierno de unión nacional (GNU), en particular al polémico líder del KwaZulu-Natal y del Inkhata Freedom Party (IFP), Mangosuthu Gatsha Buthelezi, y al último presidente del apartheid y del National Party (NP), Frederik Willem de Klerk, como símbolos de unidad y reconciliación, y para evitar la guerra civil.
En 1999, cuando todo estaba a su favor para repetir mandato, dejó voluntariamente el cargo a Thabo Mbeki, preparando de este modo su sucesión. Con ello dio una verdadera lección de democracia en un continente donde los altos mandatarios suelen aferrarse de una manera vitalicia al poder.
Se implicó personalmente en las negociaciones para la paz en la región de los Grandes Lagos, en particular en Burundi hasta 2001, así como en las negociaciones en el Outeniqua, en 1997, entre Mobutu y Kabila en la República Democrática del Congo, para evitar el baño de sangre en Kinshasa.
No quiso separar el destino de la Sudáfrica democrática con él de los demás países africanos, considerando Sudáfrica como un país africano que debe asumir un papel importante en el desarrollo económico del continente. Consideró que era de interés para Sudáfrica que haya crecimiento y desarrollo para el resto de África, y que Sudáfrica no podría desarrollarse al margen del resto del continente. En su primera participación en la cumbre de la OUA, en junio de 1994, en Túnez, manifestó: “Hoy, África es totalmente libre. Libre del poder de las minorías extranjeras y de las minorías blancas (…). África aspira a renacer de nuevo”.
Fue el único dirigente africano en protestar, en noviembre de 1995, contra el fusilamiento de los activistas ecologistas ogoníes por el régimen del general Sani Abacha en Nigeria, entre ellos el escritor Ken Saro-Wiwa.
Su desacierto fue la equivocada interpretación del conflicto de Ruanda (en términos de hutus contra tutsis), a raíz del genocidio de 1994 y en el momento que acababa de asumir el poder, y la consiguiente venta de armas al Gobierno del Frente Patriótico Ruandés (FPR), para defenderse, según él, de los ataques procedentes de los campos de refugiados hutus de la parte oriental de la RDC, posicionándose al lado de los tutsis y echando leña al fuego. A ello es preciso añadir la venta de armas al régimen militar argelino, en febrero de 1998, y al régimen islamista de Jartum. Lo que contradecía las soluciones políticas y diplomáticas, por las que apostaba, en la resolución de los conflictos africanos.
El legado internacional
Se dedicó a la moralización de las relaciones internacionales condenando los bombardeos de la OTAN contra Serbia, posicionándose contra la producción de minas antipersonas, y aprovechando su experiencia en la aplicación de los acuerdos de paz, ofreció su mediación en la resolución de conflictos en el mundo, como en Irlanda o en el conflicto árabe-israelí, y convenció a Gadafi para que entregara al Secretario General de la ONU a los dos sospechosos libios de los atentados de Lockerbie.
En los foros internacionales y en sus múltiples viajes por el mundo, no dudó en subrayar en defensa de África, que “más que ayuda, lo que sí necesita África es justicia”, poniendo de manifiesto su adhesión total a los valores de justicia y contra la arbitrariedad.
En un mundo unipolar post Guerra Fría, mostró una clara independencia en la política exterior de Sudáfrica, visitando a Fidel Castro y a Muamar El Gadafi, en agradecimiento a su apoyo a la lucha contra el apartheid, desafiando a las potencias occidentales hostiles a estos líderes internacionalmente aislados, y manifestó su disconformidad con la política de ataque preventivo de George Bush, junto a la adhesión al Movimiento de los Países No Alineados.
Las potencias occidentales le recriminaron la supuesta contradicción entre la adhesión a los derechos humanos y a los principios morales, y la colaboración con los regímenes considerados por ellas como “antidemocráticos”. Sin embargo, Obama dijo de él que era su modelo, y seguirá teniendo influencia en el mundo durante siglos.
Conclusión
La gran frustración de Mandela fue el no acabar con el apartheid económico en su país. Es decir, la segunda liberación, la socioeconómica, se reveló ser más difícil que la primera, la política, fundamentalmente por haber heredado una situación económica difícil y de desigualdades estructurales y su adhesión a las leyes del mercado sacrificando los aspectos de justicia social. Su gran mérito es haber liberado a los negros de la esclavitud y frustraciones y a los blancos de sus temores. Sin embargo, la reconciliación nacional no se acompañó de la justicia social para las víctimas del apartheid.
En este contexto, es preciso recordar las críticas de Winnie Madikizela Mandela, al Gobierno presidido por su exmarido y del que ella formó parte: le recriminó ser permisivo con respecto a los intereses de la minoría blanca, en lugar de erradicar las desigualdades del apartheid. En su opinión, se había concluido “un pacto del infierno entre las élites de los oprimidos y la de los opresores”. Al apartheid racial le había sucedido el apartheid económico y social, con la emergencia de una nueva burguesía negra que se había apartado de sus bases.
En definitiva, la gran herencia de Mandela es haber conseguido la democracia constitucional y la armonía racial y la reconciliación entre los grupos étnicos (the rainbow nation o la nación arco iris), con pocos avances en las políticas socioeconómicas. Es decir, sacrificando, para conseguir aquellos objetivos, sus principios socialistas a favor de lo positivo y lo constructivo.
Sus sucesores, Thabo Mbeki y Jacob Zuma, a pesar de conseguir importantes resultados macroeconómicos, no parecen servir a los más pobres por el conformismo económico y la falta de ambiciones de justicia social, debidos al contexto internacional y por privilegiar la unidad del país.

Los niños del Reich


Lebensborn, que significa "fuente de vida", fue una organización creada por Heinrich Himmler en 1935 estrechamente vinculada a las SS. Su principal cometido era el de preservar, expandir y potenciar la raza aria.

Para ello, miles de niños, supuestamente arios puros, fueron puestos bajo la tutela legal de las SS y criados en hogares de maternidad por toda Alemania y también por algunos de los países ocupados.

La mayoría de estos niños eran hijos de madres solteras cuyos padres eran miembros de las SS. Para pasar a formar parte de Lebensborn las madres debían demostrar su supuesta pureza aria ante especialistas raciales así como la de los padres de las criaturas.

Ante la escasez de niños arios puros en Alemania, Himmler decidió, tras el comienzo de la Segunda Guerra Mundial, expandir la organización Lebensborn por gran parte de los países ocupados. Aunque el proyecto no logró consolidarse en la mayoría de territorios, sí lo hizo en Noruega y Polonia. Para los nazis, el país nórdico representaba una mina genética debido a que interpretaban que los altos y rubios noruegos formaban parte del tronco nórdico de la raza aria, el más puro y superior a todos los demás. Por ello, casi cualquier madre noruega embarazada de un soldado de las SS podía acudir a los centros del programa con la total seguridad de que sus hijos serían aceptados. Esto representaba una salida fácil para miles de mujeres embarazadas del enemigo cuyas vidas podrían haberse convertido en un infierno debido al rechazo que su supuesto colaboracionismo, unido a la ilegitimidad de sus hijos, podría generar en la sociedad.

En Polonia la realidad fue más cruel. Himmler no olvidaba que gran parte de Polonia Occidental había pertenecido en algún momento al Imperio Alemán, por lo que soñaba con encontrar niños puramente arios en dicho territorio. Para ello formó a las SS en técnicas para el rastreo de niños arios. Una vez encontrados las órdenes eran secuestrarlos y trasladarlos a Alemania, donde serían internados en centros especiales y sometidos a un tratamiento de regermanización, aprendiendo así las costumbres y el idioma alemán y olvidando todo lo polaco.

Debido a que todos los menores polacos rubios, altos, fuertes y de ojos azules eran susceptibles de pertenecer a la raza aria, cientos de miles de niños fueron secuestrados. Estimaciones actuales hablan de más de doscientos mil, de los que apenas cuarenta mil regresaron tras la guerra a Polonia.

Pero el proyecto Lebensborn sucumbió ante las tropas aliadas que en 1945 lograron la capitulación incondicional alemana. No obstante, para los niños inmersos en el programa, lo peor estaba por llegar. Concebidos como miembros de una aristocracia racial que debía gobernar el III Reich, tras la guerra fueron presa del olvido y el rechazo popular.

En Alemania los menores, así como la organización Lebensborn fueron, simplemente, olvidados. Por ello muchos de los niños que participaron en el experimento desconocen aún hoy sus orígenes y otros muchos solo pudieron acceder a su pasado tras décadas de investigación.

Niños sin papeles: tráfico de niños


Llegan a los aeropuertos o a las costas españolas acompañados de una mujer que dice ser su madre, pero que no lo puede documentar. La policía observa lo que considera “comportamientos sospechosos” en la relación entre la madre y el pequeño. Son bebés o niños pequeños sin filiación ni identidad verificable. Y una prueba de ADN demuestra en ocasiones que esos menores no son hijos de la mujer o la pareja con la que llegan al país. La policía, la fiscalía, la oficina de la Defensora del Pueblo y Cruz Roja trabajan en común para tomar medidas que permitan llegar a conocer la identidad de estos menores. Pero no siempre se consigue.
La ley de extranjería (Ley Orgánica sobre Derechos y Libertados de los Extranjeros en España y su Integración Social, reformada en 2009) regula las condiciones para el tránsito de menores en España. Esta norma señala que si los cuerpos de seguridad del Estado localizan a un menor no acompañado indocumentado, “el ministerio fiscal lo pondrá a disposición de los servicios de protección de menores de la comunidad autónoma en la que se halle”. Cuando no se conoce su identidad ni su procedencia, son tutelados por una Administración pública y se les considera regulables.

Aunque los requisitos están claros, “existen huecos en el cumplimiento de la legislación”, como explica Carlos Chana García, responsable del Programa de Restablecimiento del Contacto Familiar y del Servicio Social Internacional de Cruz Roja Española. “Influyen la legislación de cada país, la vía por la que se acceda con el menor al territorio, la autoridad de la frontera e incluso las compañías aéreas, que unas son más sensibles que otras a este problema”, prosigue Chana. “Se utiliza a los bebés como parte de las estrategias migratorias para poder pedir luego la reagrupación familiar. Las tipologías de cómo lo hacen son variadas”. Unas veces entran con falsos padres a través de los aeropuertos y otras son parejas o mujeres solas que llegan en patera o en barco solas con un bebé que supuestamente es suyo, pero que en ocasiones no lo es. Organizaciones de defensa y protección de menores calculan que solo a través de los aeropuertos españoles la policía detecta al menos medio centenar de casos de este tipo cada año.
Cruz Roja, que es además la corresponsalía del Servicio Social Internacional en España, considera que los requisitos están claros para el tránsito de menores en el territorio Schengen, en el cual se puede circular libremente si se ha entrado regularmente en alguno de los países de este espacio. Esta organización señala que “las dificultades aparecen al aplicar los procedimientos, y los más vulnerables son los niños pequeños que se ven involucrados en los procesos migratorios”, señala Chana. “Muchos terminan en el sistema de protección de menores y, algunas veces, al cabo de los años, aparece una mujer diciendo que es su madre, cuando el niño a lo mejor se ha dado ya en adopción”, añade.
“Se usan bebés para pedir reagrupación familiar”, denuncia Carlos Chana
En su opinión, desde hace años “es difícil que se den en España casos de intercambio de niños por dinero”. “Aquí sí hay los mecanismos para detectar casos de riesgo a través de los servicios sociales”, afirma. “Además, las adopciones internacionales siguen unos protocolos muy claros en España y también se vigila mucho la situación en los países de origen de los niños. Pueden darse casos de familias, en Tíbet o Etiopía, por ejemplo, en los que las familias no entienden bien que van a perder los derechos sobre sus hijos al darlos en adopción. Creen que les van a dar una vida mejor, pero no conciben ni entienden que vayan a dejar de ser sus hijos. Este proceso puede ser discutible, pero se les explica lo mejor posible y, una vez que los ceden, los procedimientos que se siguen para darlos en adopción son completamente legales”.
Otros casos en los que los menores en tránsito no cuentan con todas las garantías que deberían son los de parejas separadas en las que uno de los miembros es de otro país y se lleva a los hijos a su tierra sin autorización, sin que se le plantee ningún problema a la hora de sacarlos del país porque es uno de los progenitores. Una vez constatada la filiación, no se solicita ningún otro papel que demuestre que tiene la custodia del menor. Los datos son difíciles de precisar en este terreno. Sin embargo, organizaciones de protección de los menores calculan que puede haber en esta situación varios centenares de niños españoles. Y el fenómeno está aumentando con el incremento de los matrimonios en los que uno de los miembros es extranjero.

Sin embargo, este riesgo se puede evitar, como explica la magistrada e inspectora delegada de menores y familia del Consejo General del Poder Judicial, María de los Ángeles Velasco: “En casos de separaciones en los que se tengan dudas de que uno de los padres pueda llevarse al menor del país sin autorización se puede adoptar como medida cautelar que se libre a todos los aeropuertos la prohibición de salida sin el consentimiento de los dos progenitores o sin autorización judicial”. Velasco explica que esta cautela se incluye ya en muchos procesos de separación y que incluso se ha dado algún caso en el que los padres que se habían olvidado de que la habían solicitado y, por ejemplo, al intentar salir un hijo adolescente del país para irse a estudiar al extranjero han tenido que acudir al juez para retirar la prohibición para ese viaje. “A mí me ha ocurrido esto en dos ocasiones. En una de ellas porque la madre no se acordaba de que en su día solicitó esa medida cautelar”, señala Velasco.
Las organizaciones de protección de la infancia insisten en que es necesario aumentar la implicación de las fiscalías y los servicios de protección a la infancia, que generalmente no intervienen más por falta de recursos, para evitar el tránsito de menores sin filiación, así como que se deben aumentar los controles de los niños extranjeros que llegan a nuestras fronteras.

La defensora del pueblo, Soledad Becerril, mandó a la policía el pasado mes de marzo una recomendación para “que se identifique a los menores extranjeros que lleguen a España de forma irregular y así evitar situaciones de riesgo para estos menores”. La recomendación fue aceptada, por lo cual, a partir de entonces, cuando la policía localiza a menores extranjeros no acompañados, que viajan con un adulto que no puede documentar su relación con ellos o cuando existen indicios de que pueda ser víctima de trata de seres humanos se procede a identificar a esos niños de forma inmediata, se pone el caso en conocimiento del ministerio fiscal y de las entidades de protección de menores, explica la oficina de la Defensora.
La policía corrobora la situación de riesgo: “Cuando un adulto manifiesta que existe una relación parental entre él y el menor al que acompaña sin documentación alguna que lo avale, se invita al acompañante a que consienta —previamente informado sobre la prueba y sus efectos jurídicos— a la obtención de células epiteliales bucales propias y del menor para la práctica de la prueba de ADN”, explica la policía.
En lo que va de año han llegado a las costas españolas de forma irregular 124 menores no acompañados y 39 que viajaban con un adulto, según datos policiales. Hay “indicios acreditados por diversas fuentes (ONG, cuerpos y fuerzas de seguridad y ministerio fiscal) de que algunos casos de traslado de menores por adultos indocumentados esconden actividades directamente vinculadas con el tráfico ilegal de niños o con la trata de seres humanos”, añade. Por eso, la policía, a instancias del fiscal de Sala Coordinador de Extranjería y de la fiscal de la Sala de Menores dictó una instrucción el pasado mes de febrero sobre “las actuaciones a realizar ante la detección de menores extranjeros no acompañados o que se encuentren en situación de riesgo”, de forma que desde entonces estos menores son “reseñados y grabados en el registro de menores extranjeros no acompañados (MENA) de las unidades de extranjería”.
Jesús Palacios, catedrático de Psicología de la Universidad Sevilla y experto en adopciones, anota que también persisten riesgos en la adopción internacional: “Hay países en los que no hay registro civil o los niños se registran con ocho o nueve años. El niño no existe, lo que facilita crearle una identidad falsa y asignarle una maternidad. Otra situación de riesgo en el tránsito de los menores son las catástrofes naturales o los movimientos masivos de población. Miles de niños vagan por las calles y no deben ser declarados adoptables hasta que se comprueba que es huérfano o que no hay nadie de su familia o comunidad que esté dispuesto a hacerse cargo de él”.
Y aunque todos los expertos coinciden en que el riesgo de adopciones ilegales en España es mínimo con la actual legislación, en otras partes del mundo no es así.
El convenio de La Haya señala cuándo un niño puede ser adoptable y cuándo no y los datos reflejan la inmensa cantidad de casos que se salen de estas reglas. El informe Las zonas grises de la adopción entre países, del Servicio Social Internacional (ISS), de 2010, señala que las adopciones que se realizan de acuerdo con el protocolo de La Haya en los 10 principales países de origen del mundo no llegan al 30%. El resto (más del 70%), no se realizan con garantías. “Es un dato preocupante y el problema es que la presión de la demanda ha generado presión de oferta dispuesta a satisfacerla”, explica Palacios. “Y sigue habiendo países, como Estados Unidos, en los que la adopción es independiente, sin la intervención de entidades públicas que controlen los procesos”.
“Las personas que quieran adoptar deben tener en cuenta no solo que España cuenta con una ley que regula estás adopciones, sino que el país en el que quieran adoptar haya suscrito el convenio de La Haya”, advierte José Ignacio Esquivias, fiscal de la sección civil y de familia de la Fiscalía de Madrid, y experto en adopción internacional. “Si acuden a otros países corren el riesgo de que no pueda homologarse la adopción en España de acuerdo con nuestra legislación, además de no tener garantías de que el menor se adopta con todas las garantías para él”. En algunos casos en los que no se hace así, los jueces y fiscales suelen aceptarlo en una forma legal similar al acogimiento, “porque hay que darles una cobertura jurídica y para no romper el vínculo creado y no dejar al niño en manos de las instituciones”. “Pero los problemas que se les presentan a las familias son inmensos, porque ni es su hijo legalmente, ni tiene su apellido”, advierte Esquivias.

Niños sin DNI y libros de familia sin fotografía

Para circular en avión, tren o barco con menores de 14 años dentro del territorio español la legislación no exige que se presente ningún documento del pequeño. Se considera responsable a la persona mayor con la que el niño realiza el viaje. La compañía responsable del trayecto puede solicitar el libro de familia, que no incluye una fotografía del menor, pero no todas lo hacen.
Dada la diferencia entre las legislaciones de los países a los que pertenecen las aerolíneas que cuentan con vuelos domésticos dentro de España surgen periódicamente problemas relacionados con la seguridad en el traslado de los menores. El último caso sonado fue el de la compañía Ryanair, de nacionalidad irlandesa, que negaba el embarque a los vuelos dentro de España a los menores de los que no se aportara un documento con fotografía, como el DNI o el pasaporte, y no consideraba válido el libro de familia por no contar con ella. “Creemos que no pedir un documento con foto podría favorecer el tráfico de menores. En estos asuntos tenemos el respaldo de las autoridades irlandesas”, manifestó Michael O’Leary, presidente de Ryanair hace un año a raíz del conflicto en el que se vio implicada la aerolínea. Los tribunales españoles dieron la razón a las personas afectadas por estas restricciones de Ryanair y la compañía se vio obligada a cambiar su política en España y aceptar el libro de familia como documento válido para autorizar que los niños viajaran en sus vuelos domésticos. Sin embargo, la duda de O’Leary sobre la inseguridad en el traslado de los menores la comparten otras organizaciones.
“En Cruz Roja recomendamos que se viaje siempre con pasaporte o DNI del menor, aunque es cierto que el riesgo es menor cuando se circula dentro del Estado, pero la garantía también lo es al no llevar una fotografía que identifique al niño”, señala el responsable de infancia en dificultades sociales de Cruz Roja Carlos Chana García.
En otros países, la variedad de situaciones es muy amplia. Muchas naciones no cuentan con ningún tipo de libro de familia. Es el caso, por ejemplo del Reino Unido o de Estados Unidos. En el primero, si se quiere viajar con menores, se les tiene que sacar el pasaporte a partir de los dos años de edad.
En este sentido, el Consejo de Ministros aprobó el mes pasado un real decreto que reduce la validez del DNI de los menores de cinco a dos años. La expedición de este documento para los niños es voluntaria. La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, afirmó que esta reforma se debe a los cambios físicos que sufren los menores a esas edades. “Entre un menor de dos y uno de cuatro hay bastante poca similitud”, señaló.
Respecto al libro de familia, su reforma la tiene sobre la mesa el Ejecutivo, pero es una incógnita si incluirá una foto del menor. El borrador de anteproyecto de Ley de Reforma Integral de los Registros, aprobado por el anterior Gobierno socialista en 2010, incluye la eliminación del libro de familia y lo sustituye por “certificaciones registrales” que podrán ser solicitadas personalmente o a través de Internet. Además, el nacido recibirá un Código Personal de Ciudadanía (CPC), ligado a una ficha personal donde figurará a lo largo de su vida todo su historial civil. El código personal consistirá en una secuencia alfanumérica que le valdrá a la persona para todos los trámites que necesite hacer en el Registro Civil. Su ficha personal podrá ser consultada de forma electrónica y será accesible para las Administraciones de toda España que lo precisen a la hora de realizar un trámite. No se especifica si la ficha personal incluirá una fotografía.

La previsión es que este cambio en el libro de familia, ligado al de Registro Civil, entre en vigor en julio de 2014, recuerdan fuentes del Ministerio de Justicia. Pero no está claro si el Gobierno plantea cambiar el texto elaborado por los socialistas o incluir una foto del menor junto a sus datos. Fuente: El País

La política del hijo único y en China y el infanticidio


La política de un niño por pareja o política de hijo único, es una medida de control de la población, a través de la limitación del crecimiento de la natalidad, establecida en zonas urbanas de China en 1979. Surge como solución a la situación de superpoblación. No podemos olvidar que China es el país más poblado del mundo (alberga la quinta parte de la población mundial.)

Características de la política de un solo hijo en China

Fomento de las familias con un solo hijo, especialmente en entornos urbanos. A través de multas para los infractores e incentivos para los que la cumplan.
Esta política se aplica sólo a parte de la población, ya que, en entornos rurales, cabe la posibilidad de tener un segundo hijo si el primero ha sido de sexo femenino.
Para aquellas familias autorizadas a tener un segundo, la separación temporal entre ambos deberá ser de cinco años como mínimo.
Actualmente se ha modificado la política para intentar moderarla, de modo que una pareja en la que ambos son hijos únicos, se les permite tener dos hijos.

Consecuencias

La política ha conseguido su objetivo de reducir la tasa de nacimientos, si embargo ha tenido otras muchas consecuencias sociales motivadoras de polémica:
Infanticidio femenino: Las familias prefieren tener hijos varones que le mantengan en su vejez, ya que en el caso de las niñas estas pertenecen a la familia de su marido y no puede ocuparse económicamente de sus padres. Esta  preferencia por varones ha llevado a prácticas de infanticidio femenino y de abortos selectivos, hasta el punto en que se han prohibido las ecografías en las que se determina el sexo del bebé. Muchas de las niñas han sido concebidas en secreto y después abandonadas.

Desequilibrio de géneros en China

Según el censo, la SRB en 1982 fue 108,5 varones por cada 100 mujeres, en 1990 fue de 114,1, en 2000 llegó a 119,3, y desde 2009 se ha mantenido en una tasa anormal de 120 nacimientos de varones por cada 100 nacimientos de niñas. Según un reciente estudio de la Academia China de Ciencias Sociales, esto provocará que en 2020 haya unos 24 millones de solteros en el país más poblado del mundo.
Envejecimiento de la población. Con todas las repercusiones que tendrá sobre el sistema de pensiones. Además siendo China la segunda economía del mundo, no puede permitir que siga disminuyendo la cifra de potenciales trabajadores.

La manera en la que la política se hace cumplir. En los vencidarios existen comités elegidos por los vecinos y designados por el gobierno. Su función es e3ncargarse de que la política se cumpla, por lo que ejercen una labor de control, en caso de que detecten a una mujer embarazada por segunda vez, su labor es convencerla para que aborte, e el caso en que la mujer se niegue pueden a llegar a usar medidas coercitibas y violentas
En un informe publicado por el grupo Defensores Chinos de los Derechos Humanos, se expone casos en donde jefes de familia perdieron su trabajo después de dar a luz a un segundo hijo, da cuenta de campañas que premian a ciudadanos que revelen los secretos reproductivos de sus vecinos y hasta documenta casos en donde mujeres embarazadas son arrastradas a realizarse abortos fuera de término.  Muchas mujeres denuncian que tras el nacimiento de un primer hijo son visitadas por funcionarios que las obligan, del modo coercitivo que pueden suponer, a someterse a ligadura de trompas.

¿El final de la política del hijo único en China?
Estas consecuencias indeseadas han llevado a plantearse el final de una política demográfica que en un principio nació como temporal. Así, algunas de las grandes ciudades, como Shanghai o Pekín, preocupadas por quién se hará cargo de los ancianos en el futuro, han lanzado políticas de estimulación de la natalidad. No obstante, el nuevo Plan Quinquenal presentado para los años 2011-2015 mantiene esta política.

Lo que supuso la caída del muro de Berlín


"El 9 de Noviembre de 1989 es una fecha que ha quedado grabada en la historia. Ese día se anunció oficialmente, en conferencia de prensa, que a partir de la medianoche los alemanes del este podrían cruzar cualquiera de las fronteras de Alemania Democrática (RDA), incluido el Muro de Berlín, sin necesidad de contar con permisos especiales. De inmediato se corrió la voz en ambas partes de la ciudad dividida y mucho antes de la medianoche miles de expectantes berlineses se habían congregado a ambos lados del muro. En el momento esperado, los berlineses del Este, a pie o en automóvil, comenzaron a pasar sin mayor dificultad por el puesto de control. Abundaron las escenas llenas de emoción: abrazos de familiares y amigos que habían estado separados por mucho tiempo, crisis de llanto, rostros que reflejaban incredulidad, brindis con Champaña o cerveza, regalos de bienvenida a los visitantes, flores en los parabrisas de los autos que cruzaban la frontera y en los rifles de los soldados que custodiaban los puestos de vigilancia. A esta primera reacción seguirían otras de carácter político y económico.
Muchos de los visitantes se dirigieron a los barrios elegantes de Berlín Occidental para celebrar su recién adquirida libertad, mientras que miles de berlineses prefirieron escalar el muro y, en muchos casos, armados de cuerdas, picos y cinceles, comenzaron a hacer realidad su sueño de muchos años, el derrumbamiento del muro de Berlín."
Sin embargo, no debe de pensarse que este acontecimiento histórico ocurrió espontáneamente. Muy al contrario, tiene sus antecedentes en innumerables hechos de la vida cotidiana alemana, así como de la política internacional.
Debe señalarse, en primer lugar, que en la Alemania Democrática las organizaciones de oposición como Nuevo Foro, Partido Socialdemócrata y Alternativa Democrática se fortalecían a ritmo acelerado, tanto por el creciente número de sus simpatizantes, como por su habilidad para hacer oír su voz en todos los ámbitos del país, esto significaba una activa participación política de los ciudadanos y, por tanto, constantes demandas de cambios democráticos a los que el gobierno ya no podía prestar oídos sordos.
Así en los primeros días de Noviembre de 1989 ocurrieron manifestaciones masivas y pacificas en ciudades como Berlín del Este, Leipzig, Dresden y Halle en que miles de alemanes alzaron su voz para exigir la dimisión de todo el gabinete en el poder, así como la celebración de elecciones libres y otras reformas.
Por otra parte, los intentos de huir a la República Democrática Alemana, que habían ocurrido desde el momento mismo en que Alemania quedó dividida, a últimas fechas se habían incrementado a un ritmo vertiginoso.
El 2 de mayo de 1989 los soldados húngaros comenzaron a desmantelar las barreras en la frontera con Austria, lo que constituyó la primera apertura al mundo occidental. Los principales beneficiarios fueron los Alemanes del Este, que de pronto podían pasar al mundo occidental a través de Hungría y Austria.
A medida que miles de alemanes del este se internaban en territorio húngaro, se incrementaron las tensiones entre los dos países. El gobierno de Berlín del este exigió a Budapest enviar de regreso a os refugiados, pero los húngaros se negaron y fue así como en tan sólo tres días, a principios de septiembre, 15,000 alemanes del Este pasaron a Alemania Federal. La respuesta del gobierno alemán del Este fue prohibir el paso a Hungría, pero esto solo sirvió para que los alemanes que buscaban escapar se refugiaran en la embajada de Alemania Federal en Checoslovaquia.
Para octubre de 1989 se vio que la revolución en Alemania Democrática era inminente. Comenzó con las marchas en pro de la libertad celebradas en Leipzig. El 9 de Octubre el jefe del partido Comunista ordenó usar toda la fuerza militar disponible para aniquilar las manifestaciones, pero Egon Krenz, el entonces jefe de seguridad, lo convenció de que retirara la orden. Nada impidió que semana tras semana aumentara el número de manifestantes. El 23 de Octubre fueron alrededor de 200,000, y para el 6 de noviembre llegaban a 480,000. Las marchas siempre pacificas se generalizaron por toda Alemania Democrática.
Mijail Gorbachov fue la pieza clave que evitó el derramamiento de sangre. En su visita del 7 de Octubre a Berlín del este, Gorbachov advirtió a los dirigentes que no contarían con el apoyo soviético si usaban la fuerza para suprimir las manifestaciones. Once días después Honecker fue despojado de todos sus cargos y lo sustituyó Egon Krenz, quien de inmediato trató de apaciguar a los manifestantes.
El 27 de Octubre, Krenz promulgó una amnistía para los refugiados invitándolos a regresar al país. Sin embargo, el 3 de Noviembre la RDA autorizó nuevamente a sus ciudadanos a viajar a Checoslovaquia, lo que fue aprovechado por varios miles de ciudadanos para refugiarse en la embajada de Alemania Federal en Praga.
Ante los éxodos masivos y proliferación de manifestaciones de protesta contra el régimen, el día 7 de Noviembre renuncia todo el consejo de ministros, el organismo que regía el destino de la RDA. Dos días después, la frontera que separaba a las dos Alemanias, al igual que el muro de Berlín, pierden su significado, de modo que ya no es necesario rodear a través de otros países como Checoslovaquia, Hungría y Austria.
El movimiento revolucionario de la República Democrática Alemana no fue un fenómeno aislado. Todos los países del bloque socialista experimentaron cambios radicales en un plazo relativamente corto.
Algunas consecuencias de la caída del muro:
La privatización de las empresas estatales del este en favor de los pulpos del oeste fue subsidiada masivamente por el Estado alemán (que se hizo cargo de la deuda externa de la RDA y de las deudas internas y externas de sus empresas), lo que provocó una descomunal emisión monetaria y un crecimiento espectacular del déficit fiscal. El 'costo' de la 'unidad alemana' ascendió a varios cientos de miles de millones de dólares ... que ahora se pretende que paguen los trabajadores del este y del oeste mediante la reducción del seguro al desempleado, de los subsidios familiares y el elevamiento de la edad jubilatoria. Este 'costo', enfatizábamos entonces, "está expresando dos cuestiones fundamentales: de un lado, la falta de pujanza, el envejecimiento o la descomunal crisis del capitalismo mundial; y, del otro lado, los métodos de destrucción económica que inevitablemente ha tenido que imponer para encarar la 'unificación' ... Todo esto importa porque demuestra los límites insalvables de la penetración capitalista en el este, y su tendencia a generalizar las condiciones revolucionarias al este y al oeste de Europa" .
La anexión significó, efectivamente, una enorme destrucción de fuerzas productivas: desaparecieron las dos terceras partes del PBI industrial este alemán y la desocupación trepó más allá del 40% de la población activa. Esta sangría sistemática del este sirvió para que los capitalistas del oeste amasaran enormes beneficios y para que la economía alemana escapara por un tiempo a la recesión ... pero cuando la 'fiesta' de la 'unificación' pasó, dejó al descubierto una crisis capitalista agravada, pero por sobre todo, ha dejado en claro que la unidad alemana sólo puede hacerla la dictadura del proletariado y el socialismo.
La crisis 'oriental' se ha convertido, entonces, en una crisis general; que la gigantesca masa de beneficios provocada por el copamiento (subsidiado) de los mercados orientales y la eliminación (también subsidiada) de los competidores orientales por los grupos occidentales, no haya alcanzado para elevar de una manera decisiva la tasa de beneficio, es una demostración inapelable de la envergadura de la crisis del capitalismo alemán. La política capitalista frente a la crisis apunta a la 'convergencia de los salarios' y a una 'flexibilización radical del mercado del trabajo en toda Alemania'. Esto significa agudizar la competencia entre los trabajadores mediante la eliminación de la estabilidad en el empleo y la introducción de la famosa 'flexibilidad'; la burguesía trata de utilizar el desempleo oriental para forzar la reducción de los salarios y las condiciones de trabajo de los obreros del oeste.
Hoy, más que nunca, cuando la 'guerra social' se desenvuelve cada vez más abiertamente, "no se puede comprender la situación alemana si no se establece la conexión histórica y política que objetivamente existe entre el conjunto de la clase obrera alemana"   
El complejo orden mundial con la caída del muro
Entre 1989 y 1991, el mundo experimentó, en secuencia rápida, una serie de acontecimientos drásticos (la caída del Muro de Berlín, la reunificación de las dos Alemanias, el estallido interno de la Unión Soviética, el término del Pacto de Varsovia y la guerra en la antigua Yugoslavia), que resultó en los siguientes hechos:
Fin de la guerra fría y del mundo bipolar, emergiendo los Estados Unidos como potencia hegemónica. Los Estados Unidos de América reunió 28 naciones aliadas y obtuvo permiso de la O.N.U. para sacar las tropas iraquíes del territorio de Kuwait en caso de que las mismas no se retiraran de sus fronteras antes del 15 de enero de 1991. La Guerra del Golfo duró desde el 16 de enero al 27 de febrero de 1991 con la rendición incondicional de Iraq.
El inicio de las reivindicaciones del Japón y Alemania, grandes potencias económicas, pero alejadas desde el fin de la Segunda Guerra Mundial de las decisiones políticas mundiales. El Japón, al recibir la negativa de Rusia de devolver las islas Curiles, ciertamente reevaluará su estructura militar, hoy limitada al 1% de su PBI por disposición constitucional impuesta por los Estados Unidos durante la ocupación al final de la Segunda Guerra Mundial.
Alemania reivindicó la retirada de las tropas de la OTAN de su territorio, ya que no existe amenaza justificada. Ambos, Japón y Alemania, desean tomar asiento como miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU. No se justifica tomar parte del "Grupo de los Siete" (líderes de las naciones más industrializadas) si no se tiene la contrapartida del poder político, a través del poder del veto, en el órgano de mayor representación política en el planeta. Tal reivindicación causó el pronunciamiento de los 108 países del Movimiento No-Alineado, reunidos en Indonesia en septiembre de 1992, manifestando preocupación con el ingreso de esas naciones como miembros permanentes del Consejo de Seguridad.
Formación de mega-bloques económicos y políticos. La formación del NAFTA, conformado por los Estados Unidos, Canadá y México, sorprendió a los países de América del Sur pues se constituía otro mega-bloque económico en el eje Norte-Norte. Por ello se concibió la creación del MERCOSUR, del cual formaban parte inicialmente Brasil, Argentina, Uruguay, Paraguay y ahora Chile. La posibilidad de formación de nuevos mega-bloques económicos (en el sudeste asiático encabezado por Japón, en el Oriente Medio a través de la identificación islámica, arrastrando las repúblicas islámicas a la ex-URSS y otros) es seria en relación a la perturbación que podría producir en las relaciones internacionales.
Interferencia cada vez mayor de la O.N.U., a través del Consejo de Seguridad, en las querellas regionales con el consecuente aumento del número de tropas y el número de "Peace Keeping Forces" (Fuerzas de Mantenimiento de la Paz).
Se ha observado que las sociedades del primer mundo ya no aceptan con facilidad que sus hijos sean enviados a regiones de conflicto, aumentando así los efectivos de los países en desarrollo, siendo una paradoja la gran presencia de sudamericanos tratando de hacer la paz en tierras europeas.
A la luz de los temas discutidos brevemente arriba, y teniendo en vista las tendencias observadas en estos preludios de la postguerra fría, saco las siguientes conclusiones:
En el campo político: el paso de un mundo bipolar a otro unipolar, de potencia hegemónica global, significa un cambio en la situación inicial de alta confrontación y baja inestabilidad, hacia una situación de baja confrontación y alta inestabilidad en el escenario mundial. En esa nueva situación, los conflictos bélicos regionales, siendo menos apocalípticos en cuanto a la amenaza de la paz mundial.
En el campo económico: el comercio multilateral, que floreció bajo el sistema del mundo bipolar, ahora ha evolucionado hacia la relación entre bloques o regionalismo económico. El concepto de soberanía no prevalece en el mundo de los altos intereses económicos, dado el hecho de que cada Estado ya no tiene la capacidad de sobrevivir sólo, lo cual ha conducido a la aparición de las economías de conjunto.
En el campo militar: la baja observada en los gastos militares durante el final de la guerra fría, en términos mundiales, no habrá de continuar, debiendo volver a aumentar en los próximos años, aunque de manera discreta. A lo largo del tiempo, habrá una reducción drástica de las armas nucleares de largo alcance y destrucción masiva y una implementación de las armas no nucleares de alta tecnología.
En el campo psicosocial: la mayor amenaza a la paz se originará a través de la pobreza, de las discriminaciones étnicas, del nacionalismo exacerbado, del radicalismo religioso, del narcotráfico y de las condiciones del medio ambiente, más que de cuestiones políticas.
Un muro psicológico separa todavía a los alemanes del Este y Oeste, cinco años después de la reunificación
La fusión económica, un éxito 
BERLIN, 2 de octubre (El País).- La Alemania unificada celebrará mañana su quinto aniversario y puede percibir, con orgullo y autosatisfacción, los logros económicos de la unidad, que resultó en este terreno mucho más fácil de lo esperado. Al mismo tiempo, observadores y políticos de todos los colores reconocen que el país se encuentra lejos de lograr la unidad interna en las mentes de los ciudadanos. Un muro, esta vez psicológico, separa todavía a los alemanes del Este y Oeste, y se teme que tardará mucho en desaparecer.
El escritor Stefan Heym publicó un extenso artículo en el periódico Neues Deutschland (Nueva Alemania) sobre la unificación, y resumió con una metáfora afortunada el proceso: "Es como la serpiente que se ha tragado un erizo. El erizo desapareció, pero la serpiente va a tener problemas de digestión".
En el momento de la unificación, cuando la nueva Alemania surgió en medio del júbilo y fuegos artificiales hace cinco años en torno al legendario edificio del Reichstag y la puerta de Brandeburgo, en Berlín, los temores se centraban sobre todo en las repercusiones económicas de la anexión de un país en bancarrota tras el fracaso del llamado "socialismo real". Se temía que un posible "abrazo del oso" de la arruinada RDA arrastrase a la pujante RFA por el camino de la inflación.
Nada de esto ocurrió. Alemania del Este dista todavía bastante de alcanzar los "paisajes florecientes" que prometió en su campaña electoral de 1990 el canciller Helmut Kohl. No obstante, el auge del territorio de la ex RDA no lo puede negar ningún observador de buena fe, y encuentra su expresión palpable en forma de mejora en las autopistas y en todas las estadísticas. No falta quien aventure que, gracias a las nuevas tecnologías y a la calificación de su mano de obra, Alemania del Este podría, al menos en algunas regiones, convertirse en avanzada del progreso en toda Europa.
El salario promedio en el Oeste es de 2,687 marcos (unos 1,800 dólares), y en el Este, 2,044 (unos 1,400 dólares); un 75% de los hogares del Oeste tienen auto y sólo un 67% en el Este. Las diferencias se miden cada vez más en términos cuantitativos, sin que pueda hablarse de una diferencia cualitativa. El ritmo de crecimiento del Este permite aventurar que no tardará en registrarse la equiparación.
Las transferencias del Oeste hacia el Este alcanzan la enorme suma de 150,000 millones de marcos anuales (unos 120,000 millones de dólares). Esto representa unos 10,000 marcos (6,800 dólares) anuales por habitante de la antigua RDA. El delfín de Kohl, el jefe del grupo parlamentario democristiano en el Bundestag, Wolfgang Schuble, escribió en el semanario Die Zeit que se ha conseguido bastante en la aproximación entre los dos sistemas sociales que se fusionaron hace cinco años: "Hemos llegado hasta el límite de lo posible en lo económico y lo político, pero la unidad interna no llega todavía".
La prueba irrefutable de la existencia de esa división alemana, cinco años después de la reunificación, se encuentra en el campo de la política, hasta un extremo que ha dejado perplejos a casi todos. El portavoz del gobierno de Berlín, Michael Butz, comentaba estos días durante un almuerzo con corresponsales extranjeros: "Si alguien nos hubiera dicho hace cinco años que el partido heredero de los antiguos comunistas iba a tener un 20% de votos en el territorio de la dictadura desaparecida, no lo hubiéramos creído".
La unidad alemana todavía no es una realidad -reconoce Gerhard Schroder
Noveno aniversario de la reunificación
BERLIN, 3 de octubre (DPA).- El jefe de gobierno alemán, el socialdemócrata Gerhard Schroder, admitió hoy que la unidad de la sociedad alemana aún está lejos de ser una realidad.
En una acto realizado en la ciudad de Wiesbaden con motivo del noveno aniversario de la reunificación alemana, Schroeder señaló que "si bien es cierto que la frontera entre el Este y el Oeste de Alemania hoy se ha hecho invisible, no se puede decir lo mismo de los límites creados por la diferencia social y económica".
La fiesta oficial de la unidad alemana se celebró este año en Wiesbaden y en ella tomaron parte los principales dirigentes políticos del país. Miles de ciudadanos participaron en los actos de festejo en las calles de la capital del estado federado de Hesse.
También en la capital federal, Berlín, se realizaron festejos populares para celebrar el aniversario de la reunificación.
En Wiesbaden estuvo presente el presidente de la Comisión Europea, el italiano Romano Prodi, quien abogó por una identidad común de los pueblos europeos, "por una ciudadanía europea".
El 3 de octubre es una fecha de agradecimiento a todos los alemanes, manifestó Schroeder en su discurso. "A los habitantes de la entonces Alemania Oriental -dijo- va nuestro agradecimiento por el valor demostrado al enfrentarse a la dictadura, a los de la entonces República Federal por su solidaridad y su ayuda".
"Esa solidaridad demostrada entonces es la que nos seguirá haciendo falta en los próximos años", concluyó el jefe de gobierno. Vicky Galvis. Fuente:  www.monografias.com